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domingo, 4 de agosto de 2013

Amor imposible








A veces el espejo no nos devuelve la imagen que quisiéramos ver.

Peldaño a peldaño creí estar escalando puestos en tu corazón. Día a día me fijaba en cada uno de tus movimientos; tus palabras y deseos los hacía míos para conseguir que todo fuera perfecto. Desde tus ojos miraba los colores que te hacían vibrar, los paisajes que te emocionaban y las personas que te parecían importantes o sensatas. Desde tus labios besaba, sentía, acariciaba. Desde tus manos aprendí a modelar el mundo; tu piel era mi piel, tus negros cabellos formaban parte también del conjunto en el que me había transformado.
Aquel retrato antiguo fue todo lo que me dejaste, tan manoseado que casi era indescifrable, pero en mi espejo te veía reflejado cada mañana. Y tu sonrisa se dibujaba en mi cara. Dejé de verme, de sentirme, anulé todo mi ser para formar parte de ti. Ahora ya no estás. Sola, me pregunto ¿Qué hice mal? El espejo me devuelve una imagen desfigurada, por más que la miro no consigo reconocer en ella los rasgos que te hicieron mío.
 © Yashira  2013



12 comentarios:

  1. No sé, quizás para enamorar a alguien lo importante es no perder su individualidad. Parece, quizás, que hables de un narcisista.

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    1. Claro Javier, nunca se debe perder la individualidad, pero esta forma de amar es más común de lo que imaginamos.

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  2. Querida Yashira, creo que has reflejado muy bien los sentimientos y acciones de una persona, una mujer en este caso, que sólo tiende a agradar al otro cuando se enamora. Pierde su propia identidad, su voz, sus gustos..., y atiende sólo a lo que pueda ser del gusto del otro.
    Como muy bien indicas al final, el desenlace es feo, más si pierde el amor.
    Muy buen micro: con pocas palabras, describes una situación muy compleja y frecuente, por desgracia.
    Un beso.

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    1. Un amor así no puede acabar bien, es un toque de atención precisamente a las personas que tienden a entregar o entregarse demasiado. Gracias por tu comentario preciosa amiga.

      Besos.

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  3. Magnífico relato con texto casi lírico. Felicidades.

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    1. Gracias Francisco, un placer tenerte por mi espacio.

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  4. Micro que habla de algo que pocas veces ocupa espacio en el mundo de las letras y si lo ocupa es en la novela negra. Lo desmenuzas delante de nuestros ojos con pasmosa tranquilidad, poco a poco nos vas soltando perlas y es al final cuando el lector puede chocar con la verdad. Esos fueron mis sentimientos. Felicidades.

    Saludos

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  5. Yashira, cuando he leído tu relato, me he quedado sorprendida, pues tengo un relato que trata la misma temática, la mismita. Cuántas mujeres (también hombres) dejan de ser ellas mismas por agradar al ser amado y no son conscientes de su grave error, van perdiendo su IDENTIDAD hasta el punto de olvidarse de quienes son. Luego cuando se termina esa relación que parecía perfecta y maravillosa... ¡Cuánto cuesta volver a ser una misma!. Nunca se debe perder el "YO" para convertirse en el "tu", nos tienen que aceptar por lo que somos y por como somos. Me gusta tu blog. Un abrazo.

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  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  7. Qué bonito nos relatas esta tragedia.
    Un fuerte abrazo

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  8. Pero no hay que decir "qué hice mal" sino "qué salió mal", porque si no se van de rositas los demás.
    Un beso
    Juan M

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  9. A veces no hicimos nada mal, a veces fue la otra persona, otras nadie, es la tragedia del desamor, no podemos atar un sentimiento que puede marcharse tan rápido como llegó. Un placer leerte, saludos!!

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Gracias por tu comentario. Me alegra saber que pasaste por aquí.